Afterlife es un juego muy original en el que tu misión se resume en salvar al mundo, contando para ello con un globo aerostático que puedes controlar de la manera que quieras.
Cada escenario está plagado de multitud de alienígenas que hacen todo lo posible para sembrar el caos. Con tal de impedirlo tendrás que actuar con rapidez.
Todas las fases presentes en Afterlife hacen gala de una curva de dificultad ajustada al milímetro, por lo que su mecánica se adapta también a niños pequeños. El apartado sonoro congenia a la perfección con los gráficos retro que gustan especialmente a los amantes del estilo 16 bits.
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